Padre de dos. Bloguero. Podcastero. Tuitero.

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Keep Calm and Slowpreneurship

Si estás emprendiendo este post es para ti; a no ser que entre tus objetivos estén hacer una ronda de financiación, tener Business Angels, presentar delante de una firma de Capital Riesgo y vender el 13% de empresa que te quede por una millonada. Si este es el caso, por favor, vete de aquí.

Pero si estás emprendiendo porque te mola lo que haces, porque te lo pasas bien y porque quieres seguir haciéndolo hasta que te canses (y te aseguro que eso pasa), este post es para tí.

En el primer camino, el de las rondas de financiación, habrá mucha gente que gane dinero SEGURO, pero tu lo más probable es que no. Ganarán dinero los asesores que durante ese camino se ofrezcan, cual Lobo de la Caperucita Roja, a enseñarte el camino dorado del emprendimiento a cambio de unos modestos honorarios o de un % de tu empresa. Ganarán dinero las entidades que se ofrezcan a tramitarte préstamos, subvenciones y financiaciones varias a cambio de un % del dinero que te consiguen (si, te lo consiguen ellos, pero lo devuelves tú… incluso la mordida que ellos se quedan). Ganarán dinero los auditores, consultores y contables que deberás contratar para confirmar que los datos que has dado para obtener ese préstamo son reales. Ganarán dinero los buitres que se quedarán una parte de tu empresa para ayudarte a llegar lejos. Pero no te olvides que, aun y teniendo a todos estos subidos al barco, el único que de momento está remando eres tú.

La Caperucita y el Lobo

 

Así que tómatelo con calma, no tengas prisa porque quizás al final llegues a un sitio al que no querías ir… como esas noches de farra con pocas ganas y mucho alcohol en las que el conocido de un amigo tuyo os acaba llevando a un local con humo y luces rojas.

Ten claro lo que te gusta hacer, lo que te divierte. Lo que te mantiene despierto por la noche y lo que te hace despertarte temprano cada mañana (a parte de los hijos, que eso también es un emprendimiento… pero de los que ni calma ni slow ni leches). Mantente focalizado en hacer lo que te gusta y en hacerlo bien, en ser el mejor del mundo en ello. Encuentra quienes lo valoren y haz que lo valoren. Mantente fiel a tus principios todo el tiempo, no te perviertas por promesas de futuros ingresos. Trabaja duro, equivócate rápido y aprende de ello. Haz de tus errores de hoy las mejoras que implementarás mañana. Rodéate de gente positiva, que crea en tí y en tu proyecto y que aporte valor desde el primer momento. Hoy harás mejor lo que hiciste ayer, y mañana mejorarás respecto a hoy. No tengas prisa por crecer. Ante las decisiones importantes, piensa si realmente te ayudan a llegar a dónde quieres llegar, o si te está influenciando lo que se supone que deberías hacer.

Yo fui de los primeros, y fue un gran error. Y aún y así, pensé que ese era el único camino del emprendimiento. Pero por suerte, mi poder de convicción no fue suficiente. Y la Caperucita se comió al Lobo.

Fabriquemos Niños Emprendedores #7Dias7Posts

No me puedo imaginar un perfil de emprendedor mejor que un niño. Un niño piensa que puede conseguirlo todo. Un niño se obsesiona con las cosas que le gustan y no les hace caso a las que no le gustan. Un niño no para de imaginar y de pensar. Un niño juega todo el tiempo y vive para ser feliz. Un niño es valiente, intrépido, aventurero pero a la vez mide los riesgos. Intenta las cosas una y otra vez hasta conseguirlas.

Un niño se las ingenia para conseguir lo que quiere. Lo intenta por si mismo o pide ayuda a quien sabe que puede hacerlo. A los papás y mamás enseguida nos asignan poderes en función de nuestras habilidades: curar, jugar, proteger, dormir, comer, pasear.  Y usan todos sus recursos para que les ayudemos en lo que necesitan de nosotros. Un niño está sólo en una playa sin nada alrededor, y encuentra la manera de que se convierta en un campo de juego.

Buscando piedras

Buscando piedras

Y el mundo necesita de los niños. De niños que sean niños. Niños que jueguen, que canten, que salten, que bailen. Que molesten a los mayores a los que les molestan los niños. Que no se cansen de ser niños y que no dejen de serlo por el mero hecho de que los mayores les empujemos a ello.

Un emprendedor es como un niño. No se plantea que algo no puede hacerse. No piensa en sus limitaciones ni en las veces que le han dicho «no». No se frena ante el primer tropiezo, ni deja de intentarlo cuando no lo consigue. Un emprendedor pivota, busca nuevos caminos, nuevas soluciones. Se junta con gente que sabe más que él para hacer equipo.

El mundo necesita emprendedores. Los emprendedores mejoran el mundo. Esto es así. Solucionan cosas que deben ser solucionadas, incluso cosas que no sabíamos ni que eran un problema. Piensan nuevas y mejores maneras de hacer las cosas. Cambian las cosas, porque saben que pueden cambiarlas.

Así que fabriquemos Niños Emprendedores. El mundo nos lo agradecerá.

Fracaso

Fracaso: Falta de éxito o resultado adverso.

Sin tapujos, sin medias verdades, sin «pero aprendí mucho». Mi proyecto emprendedor fue un fracaso.

Fracaso porque no conseguí llevarlo dónde esperaba. Pivoté y pivoté, como si fuera Hakeem Olajuwon en uno de sus famosos movimientos de «El Bailarín de Claqué del Cotton Club». Pero de tanto pivotar quizás acabé mareado, sin saber hacia dónde ir. No tener claros los pasos a seguir para el proyecto fue mi primer error.

Fracaso por no conseguir involucrar a todos en una misma dirección. No supe liderar, no tomé las riendas, no quise tomar decisiones drásticas pero necesarias al inicio y luego lo pagué. Algunos me siguieron, y les estaré eternamente agradecidos, pero no supe hacer lo mismo con los demás.

Fracaso porque no lo ví venir. Perdí mucho tiempo pensando que tenia sentido, cuando era evidente que ya no lo tenía. Dejarlo varios meses antes hubiera sido lo lógico, viendo que no arrancaba como esperaba y que seguramente yo no era la persona ideal para liderarlo.

 

Fracaso por dejarlo rápido, sin barrer el suelo antes de cerrar la puerta. A veces cortar por lo sano es lo mejor, pero hay que hacerlo bien, y yo no supe hacerlo. Tuve prisa en irme y dejarlo, porque vi claro que era tarde y que debería haberlo hecho antes.

Fracaso por perder una gran oportunidad. Una oportunidad de crear lo que creía que tenia sentido, de convertir una idea en realidad. De demostrar que pasar de la idea a la acción es posible.

Vuelve a intentar

Shoot Again

Fracaso por haber perdido las ganas de emprender. No es para mí, al menos ahora. No tengo ganas, no quiero volver a intentarlo. Ser emprendedor no es sexy, no mola, no tiene glamour. No el que te venden antes de serlo.

Han salido cosas muy buenas de estos fracasos, pero las dejaremos para otro día.

Jóvenes emprendedores

El claim de este blog es Niños Emprendedores. Porque tener la inocencia, curiosidad y ganas de aprender de un niño es básico para ser emprendedor. Y porque criar un hijo es el mayor proyecto emprendedor que tendrás jamás.

Puedes ser lo que quieras ser.

Mi amigo ComoVader (si, eres mi amigo… te guste o no) va a ser Doula. Si no sabes lo que es y quieres desinformarte, puedes leer el Informe Doulas, o ver lo que hizo el Equipo de Investigación de Antena3. Si quieres ver la otra cara de la moneda, puedes leer a Mare Meva o a tantas otras doulas. Si te convence lo que dicen, puedes firmar esta petición de Change.org.

Keep walking, my friend

Dicho esto, vamos al grano. Tu puedes ser lo que quieras ser. Las Matronas dirán que no puedes ser Doula porque las Doulas son el demonio personificado. Las Doulas se quejan de ello porque dicen que la labor de la Doula es complementaria a la de la Matrona, porque acompaña emocionalmente en el parto y pos-parto. Pero luego, algunas dicen que un hombre no puede ser Doula (porque un hombre no tiene suelo pélvico o porque hay que saber muchas cosas de la zona en la que el bajo vientre pierde su nombre). Por eso cuando estudias Medicina, no puedes especializarte en Ginecología si no tienes vagina, o Urología si no tienes pene. Igual que no puedes estudiar Psicología o Psiquiatría si no estás loco o tienes una enfermedad mental. Supongo que tampoco puedes ser Feminista si no eres mujer, y que solo puedes combatir el racimos si eres negro, moro, gitano o amarillo.

Pues lo siento, pero no es así. Puedes ser lo que quieras ser. Nadie puede manipularte ni condicionarte si tu no te dejas. Así que oídos sordos a los que dicen que no puedes o no debes. Escucha sólo a los que te animan a seguir y te ayudan a crecer. A los que te empujan para que llegues más lejos. Aparta de tí a los negativos y a los que te ponen piedras en el camino… úsalas para construir un muro que te separe de ellos y súbete a él para llegar más arriba si cabe. Ve a por ello y pasa de los demás.

«Keep walking, my friend»

Emprender y Criar – razones y momentos más que parecidos

Emprender y Criar son a veces dos caras de la misma moneda.

Somos muchos y muchas los que decidimos emprender en el momento en el que vamos a criar a nuestros hijos. Muchos dicen que tener un hijo te cambia… y es verdad. Cambian tus valores, tu percepción del mundo, tu manera de entender la vida. Pasas a tener alguien que es más importante que tú, al que quieres por encima de todas las cosas y por el que harías lo que fuera.

Emprender y criar

Creo que los factores que nos empujan a emprender en un momento quizás tan poco apropiado son los siguientes:

Conciliación: Queremos conciliar más y mejor. Emprender y Criar son flexibilidad horaria, para bien y para mal.

Realización: Tener un hijo te aporta una satisfacción personal a nivel emocional, y hace que quieras sentirte realizado en todos los planos. Quieres que tu hijo se sienta orgulloso de tí.

Iniciativa: Quieres tomar las riendas, dejar de depender de un jefe idiota y compañeros que no te entienden.

Invencible: Si has sido capaz de crear vida… no vas a poder crear una empresa? Tu vas a poder con eso y más!

Pero empiezas a emprender, y ves que se parece en mucho más de lo que esperabas!

Haces un Business Plan, igual que hiciste un plan de parto… y luego no se pareció en nada a la realidad! Mejor estar atento y ser flexible para adaptarte a cada momento.

Los primeros pasos, los primeros meses siempre son dubitativos. Cada nueva etapa o decisión parece trascendental… camisa de batista o body? Logo naranja o azul? Twitter o Facebook? La verdad… sólo probando y mejorando sabrás que es lo que más conviene.

Y como educas a tu hijo? Le encaminas hacia dónde crees o dejas que explore y decida por si mismo? Como sé que va a funcionar y que no? Yo lo tengo claro… descubre los porqués y construye a partir de ahí…

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